Carlos F. Pérez de Villarreal
El ascensor
El
ascensor estaba en un costado. Me acerqué a él. La puerta metálica, lustrosa,
reflejaba borrosamente mi imagen. Apreté el botón de llamado y esperé.Al
abrirse la puerta, sin ver a nadie, entré. Automáticamente la abertura se
cerró. Marqué el 2do. Piso y el leve temblor que sentí, insinuó un movimiento.Pero…
¡El ascensor comenzó a bajar! Bajó y siguió bajando, bajando.Mi asombro no
tenía límites. Sentía que descendía cada vez más rápido. Las luces ya no
indicaban nada. Perdí la noción del tiempo.De repente. ¡Se detuvo bruscamente!
Mis manos agarrotadas, casi no se podían abrir. Me quedé paralizado, esperando.
Mi corazón latía desaforadamente; estaba empapado de sudor. El hecho de desconocer lo que habría detrás de esa puerta, hacía
más patético mi temor. Sentí un ruido delante. La entrada se abrió de golpe, y
lo vi. ¡Era el averno! Criaturas
grotescas, monstruosidades deformes. Todo aquello que la cultura me había
enseñado sobre el infierno estaba allí. ¡Todo!Casi inmóvil, no podía ni
respirar. Una forma inhumana, bestial, se acercó y me miró fijamente. En sus
ojos vislumbré todo lo horrible que
pudiera imaginar: atrocidad, ferocidad, brutalidad, sinrazón…En ese instante,
la puerta se cerró y el ascensor comenzó a subir rápidamente. Mi cuerpo empezó
a recuperarse y cuando la hendidura se abrió, salí hacia el hall a los
tropezones. Me quedé inmóvil, nervioso.De pronto… me desperté sobresaltado sentado
en un banco. ¡Estaba allí en el edificio! Miré la hora en el reloj. Cansado, me
había quedado dormido. ¡Por Dios, todo había sido un mal sueño! Se hacía tarde.
Debía dirigirme al 2do. Piso tal cual me habían explicado.Me dirigí al ascensor.
Cuando se abrió, entré y marqué el botón correspondiente. La puerta se cerró y…
¡comenzó a bajar aceleradamente!
En la presentación del Encuentro
El Combate
Con
el catalejo en las manos, otea el horizonte. La planicie comienza a fluir de
maturrangos.La infantería con sus banderas desplegadas, formada en dos columnas
y alentada por el sonar de parches y flautines, avanza segura de sí misma.En
total son cerca de 250 hombres. Piensa
que tiene solo 120 de a caballo, pero no le importa. El tema no es el
porqué sino el cómo y por dónde.¡La idea llega a su mente como un relámpago!Dos
columnas de 60 hombres cada una, la primera por el centro y la otra por el
flanco izquierdo. Ataque por sorpresa, encuentro, batalla, nuevo cruce y
retirada.Baja de su puesto de observación.Monta el bayo de cola recortada, desenvaina
y se dirige a sus hombres: “¡sables y
lanzas nada más, ni un tiro”! Las dos columnas salen al galope tendido
desde atrás de las murallas y en un ataque sorpresivo avanzan como una ola
embravecida. 60 hombres desplegados en línea cabalgan por el centro como
centauros. Por el otro lado los restantes… Una formidable máquina de guerra.La
carga es mortífera. El zumbar de los sables en el aire, el crujir de huesos,
los ayes y los gritos confunden todo.En un instante se ve en el suelo, su
pierna derecha atrapada bajo el caballo. Intenta salir… no puede. Lo ayudan. Otro
hombre más lo saca. Ve caer a quien lo rescató.De rodillas con el cuerpo
agonizante del granadero en su regazo, lo abraza. La sangre de Cabral mancha la
pechera y el hombro de su uniforme.Viene el segundo ataque… los infantes
españoles se desbandan y corren hacia la barranca. Se levanta. Escucha el
clarín tocando nuevamente ¡a degüello!El campo queda regado de muertos y
heridos. Todo ha sucedido muy rápidamente.La primera y única batalla de los
granaderos en tierra argentina, tiene su página gloriosa.Es el 3 de febrero de
1813.Se siente cansado, pero sus hombres han respondido… ¡y bien! El orgullo lo
inunda.Sin que él lo sepa, José Francisco ha comenzado a trenzar la historia…
nuestra historia.
Luis Lujan y Carlos
El último
Llovía,
persistentemente… como casi todos los días en esa época del año.
Había
vuelto a la ciudad, su ciudad, luego de casi diez años.Diez años recorriendo
América. Caminos que ya no eran los mismos.Demasiado tiempo.
Lo
primero que hizo al llegar fue transitar el viejo barrio, sus esquinas conocidas,
sus veredas, su antigua casa familiar.Luego fue hacia el centro, llegó hasta el
puente, desde allí veía toda la bahía.
Se quedó pensativo.
Escuchó
el ronroneo del potente motor de la moto bajo sus piernas, sintió su fuerza y
miró el sidecar cubierto con una lona especial, hecha hacía mucho tiempo atrás.
Permitía mantener seco todo el contenido: combustible, repuestos, carpa, bolsa
de dormir, comida, bebida… lo indispensable para vivir.Cruzó la plaza y se
dirigió al hotel, aquel tan recordado. Bajó y se sentó en las escalinatas, a
resguardo.Sintió frió, se levantó la capucha y miró el mar, ese mar que tanto
lo atraía.
Ese
mar que había sido su compañero de aventuras desde chico, nadando, pescando, navegando… Olas pequeñas besaban
la playa. Parecía que se mantenían a la expectativa por la falta de viento.La
lluvia había parado, comenzaba a sentirse una brisa del sur, que llevaba las
nubes lejos, más allá del horizonte.Dejó la moto, bajó por la recova, siguió
por las escaleras y al fin pisó la arena.Compacta por el agua caída, no había
ninguna huella. Sólo las que él iba dejando.Se sentó sobre la orilla, casi al
borde del agua.Se sintió triste y solo, pero ese sentimiento ya era su viejo
amigo.
La
resignación llega cuando la razón desiste.Lo sabía.
Él
era el último de su especie.
Era
el último ser humano sobre la Tierra.
Carlos lee sus trabajos
Themba Zulú
El sol del mediodia recalentaba el
ambiente y las nubes de polvo se elevaban rapidamente impulsadas por pequeños
remolinos. El joven zulú, de nombre Themba,
corría
con ese ritmo potente y sistemático que los de su clan solían tener.Detrás de
él, a un kilometro escaso, doce hombres de su tribu seguían su rastro. Se
estaba cumpliendo la ceremonia que marcaria la entrada a la adultez. No podía
fallar, era hijo de Shaka.Se detuvo,
había encontrado las huellas de Mbube. Desde lo alto de un peñasco lo vio. Era
un macho adulto, realmente enorme. Espero pacientemente a que el grupose
acercara. El viejo macho, se despertó sobresaltado. El olor del humano lo había
sofocado. Rugió bravamente. Los hombres comenzaron a cerrarse lentamente
mientras la fiera giraba dentro…cien metros, cincuenta, veinte… y cuando ya
casi tocaban lanza con lanza, Themba saltó adentro.Mbube rugió nuevamente y
enfrentó su figura. El corazón del joven latía fuertemente. Amagó con la mano
derecha.Cuando la bestia giró, soltó el isihlango y en un movimiento veloz tomó
la cola de la fiera… ¡Lo había logrado! El animal, instintivamente, lanzo su
garra derecha contra el joven y enderezando la cola como una barra de hierro, saltó
sobre la muralla humana, perdiéndose en la espesura. Themba, sorprendido, notó
su mano tremendamente dolorida por el sacudón y lentamente vio la sangre
deslizarse por su pecho: las garras habían tocado el pectoral de refilón
dejando cinco marcas casi paralelas.Cayó de rodillas… y perdió el
conocimiento.Lo despertó la algarabía de sus compañeros. Todos bailaban y
cantaban a su alrededor, porque la iniciación se había cumplido. Ya era un
adulto. ¡Había tocado la cola de un león de la selva! Sintió ardor en su pecho
y comprobó que le habían colocado ceniza sobre las marcas dejadas por el
animal. ¡Quedarían grabadas de por vida en su cuerpo! Era la señal que ya a sus
16 años… ¡era un guerrero de la impi
de Shaka Zulú!
Lectura de cuentos
¿Quién eres?
Ese
día sabía que si subía a actuar, algo pasaría. Lo presentía.Siempre quise ser
actor, estimado lector. No me pregunte por qué, pero siempre lo quise. Criado
en un matrimonio de artistas, desde niño, las tablas fueron mi hogar. Así nació
mi carrera, que poco a poco fue transformándoseen una verdadera forma de vida.
Existía solo para actuar. Convengamos que actuar no resulta ser tan fácil. Uno
debe meterse en la piel de cada personaje, dejar su yo de lado y asumir el otro
yo, aunque éste, siempre contenga al verdadero.¿Qué paradoja, no?Uno es uno
mismo y no uno ajeno, y transformarse en el otro no es sencillo. Pero para mí,
la actuación fue la manera de vivir, excluyente y sin miramientos.Estudié con
grandes actores, en institutos de renombre mundial, me esforcé al máximo y
logré el resultado esperado: reconocimiento. Pero ese día sabía que si subía al
escenario, algo pasaría. La obra era un estreno en el principal teatro de la
calle Corrientes, en esa inmensa metrópolis llamada Buenos Aires. ¡Qué hermoso me parecía todo eso,
qué espectacularidad, qué sentimientos tenia dentro de mí, porque allí estábamos… actuando!De pronto, en un
instante -lo recuerdo con gran claridad-,
al final del segundo acto, sentí un agudo dolor en la parte izquierda
del pecho. Me doblé en dos, caí al suelo exánime, casi sin querer. Y casi sin
querer me morí. Sí, me morí. Lisa y sencillamente dejé de vivir.Al final mi
presentimiento tuvo razón, algo iba a pasar si subía a actuar.Pero aquí no
concluye todo, estimado lector. No, todavía falta lo mejor… o lo peor, de
acuerdo a cómo se lo mire. Cuando partí y llegué, alguien preguntó:
-¿Quién eres? -Un actor. –respondí.
-Sí, pero… ¿quién eres?No supe qué decir.
Leyendo Ponencia
Tema:A
– 2 Animales fantásticos – Leyenda y mitos
Título:Pegaso
el caballo alado
Introducción
El
ser humano siempre ha intentado comprender las fuerzas de la naturaleza. Cuando
no pudo hacerlo, hizo entrar en juego su fantasía. Así ha logrado perpetrar en
la mitología, dándole a ésta, la posibilidad de asociar todo lo impenetrable,
lo enigmático.
Dentro
de esta mitología se encuentra la griega, constituida por un conjunto de leyendas
que provienen de esta antigua civilización y que formaban parte de su patrimonio
cultural.Estructuralmente compleja, estaba plagada de dioses, monstruos y
batallas que libraban entre sí.
Estrechamente
ligada con la mitología romana por los nombres de varios dioses y personajes de
importancia, también se relaciona en cuanto a la parte mitológica de la religión:
creencias y tradiciones.
La
civilización griega se fue configurando hace 4.000 años y se desarrolló
plenamente alrededor del año 700 a.C. ya que aproximadamente en esta última
fecha aparecieron tres colecciones clásicas de mitos: la Teogonía del poeta Hesíodo
y la Iliaday la Odisea
del
poeta Homero.
Los
griegos creían que los dioses habían elegido el monte Olimpo, en Tesalia, como
su residencia, constituyendo una sociedad organizada, moviéndose con total
libertad. Formaban tres grupos que controlaban sendos poderes: el cielo, el mar
y la tierra.
Hoy,
tenemos una gran familiaridad con los grandes mitos de la antigüedad clásica y
posiblemente uno de ellos, transmitido de generación en generación, ha llegado
hasta nuestros días, con una fuerza muy considerable.
En
principio debemos considerar que el caballo ha sido y lo es, el animal que ha
acompañado al hombre en toda su dimensión. El ser humano ha utilizado su fuerza
y su velocidad desde que lo domesticó, para cambiar su forma de vida.Pudo
trasladarse con rapidez a sitios muy distantes llevando consigo cuanto
necesitaba.Los caballos se convirtieron en un bien tan apreciado, que incluso concedieron
gran poder a sus propietarios.
Y
si a ese animal, le agregamos alas para que pudiera volar,-sueño significativo
en la psiquis del hombre-, porque el ansia de volar sigue estando presente en
nosotros,respondiendo a una aspiración muy humana; tenemos la conjunción perfecta
de ambas esencias en un ser mitológico: Pegaso, el caballo alado, del cual
trata esta ponencia.
Desarrollo
Pero
antes de hablar de Pegaso, hay dos seres a los cuales debemos prestar atención:
Por
un lado, Perseo.
Pero…
¿quién fue Perseo?
Fue
un semidios, un héroe mitológico, hijo de Zeusy
la mortal Dánae, quien fuera
fecundada por una lluvia dorada enviada por el dios.
El
Rey de Argos (Acrisio) -abuelo de este héroe-, debido a una profecía, no creía
divino el nacimiento del niño. Por esa razón, ordenó encerrar a ambos -madre e
hijo-, en un baúl de madera y arrojarlos al mar.
Ante
esta situación, Zeus, pidió aPoseidón
(Dios del mar)que los salvara. Así fueron depositados en la costa de la
isla de Sérifos, gobernada por Polidectes.
El
hermano de este,Dictis, crió a Perseo
como su propio hijo.
Por
el otro lado, tenemos a Medusa.
¿Quienfue
Medusa?
Era
una de las tres hermanas Gorgonas
(Medusa, Esteno y Euríale). Hijas de Tifón
y Equidna, en ambos casos monstruos del inframundo.
Los
pintores de vasijas y talladores de relieves griegos antiguos, imaginaban a
Medusa y sus hermanas como seres nacidos con forma monstruosa, sin embargo, los
escultores y pintores del siglo V empezaron a imaginarla como hermosas, a la
par que pavorosas. Esta última versión es la que ha llegado a nuestra época.
En
una oda escrita en el año 490 a.C. ya se habla de la “Medusa de bellas mejillas” Y en una versión posterior del mito, narrada por el
poeta romano Ovidio, era
originalmente una hermosa doncella, “la
celosa aspiración de muchos pretendientes”y sacerdotisa del templo de Atenea.
Cuando
Medusa fue violada por Poseidón, la enfurecida diosa transformó su hermoso
cabello en serpientes e hizo su cara tan terrible, que su mera visión convertía
a los hombres en piedra.
Así,
Perseo, por pedido de Acrisio, partió a buscar la cabeza de Medusa. Con la
ayuda de Atenea y Hermes, que le dio las sandalias aladas,
la capa de invisibilidad de Hades,
una espada y un escudo espejado, cumplió su misión.
El
héroe mató a Medusahaciéndole mirar su reflejo en el espejo, en lugar de
enfrentarse directamente a ella para evitar quedar petrificado.
Cuando
cortó su cabeza, de la sangre que brotaba de su cuello nació su descendencia: Pegaso,
el caballo alado,y Crisaorsu
hermano gemelo.
Aliado
de Perseo, Pegaso, fue el primer equino que consiguió estar entre los dioses de
la mitología Griega en el Olimpo. Era el caballo de Zeus.
Poco
después de su nacimiento, el mágico corcel golpeó con una coz el suelo del
monte Helicón y en el acto comenzó a
fluir un manantial, que, consagrado a las Musas, se cree, es la
fuente de la inspiración poética.
Pegaso,
creció y vivió sus años de potro en los valles y prados del monte Olimpo,
morada de los dioses. Era un bello ejemplar, cruza del caballo ario y del
persa, de color blanco y gran poderío. Suele representárselo también en negro y
posee una característica, cuando realiza su vuelo, mueve las patas como si en
realidad estuviera corriendo por el aire.Se dice que por la tierra corría "como
el viento".
El
relato más significativo sobre Pegaso fue su relación con Belerofonte, hijo del Rey Glauco
de Corinto, quien obsesionado trató de capturar al caballo.
Siguiendo
el consejo de un adivino, pasó una noche en el templo de la diosa Atenea.
Mientras dormía, esta se le apareció con una brida de oro junto a él, y con
ella pudo apresar y amansar fácilmente al equino alado.
A
partir de ese momento, Pegaso se convirtió en una gran ayuda para el héroe y lo
acompañó en sus aventuras contra las Amazonas y la Quimera, bestia de múltiples cabezas, que asolaba los territorios
de Licia.
Belerofonte,
sin embargo, fue víctima de su propio orgullo. Cuando logró volar hasta la cima
del monte Olimpo para reunirse con los dioses, Zeus, molesto por su osadía,
envíaa un insignificante mosquito que pica el lomo de Pegaso y precipita al héroe
al vacío.Queda lisiado y condenado a vagar apartado del resto del mundo toda su
vida, recordando su gloria pasada.
Pegaso
encontró refugio en los establos olímpicos y Zeus lo nombró portador del rayo y
del trueno, símbolos máximos de su poder y el encargado de conducir el carro de
Aurora, que con su paso anuncia el
día antes de amanecer.
Con
el paso del tiempo, fue convertido en una constelación formada por cuatro
magníficas estrellas brillantes en forma de cuadrilátero, para que fuera eterno,
(cuando esto sucedió, una pluma de sus alas cayó cerca de Tarso, y así la
ciudad adoptó su nombre).
Hoy,
podemos observar que Pegasus es una preciosa y enorme
constelación boreal, visible durante más de siete meses en el hemisferio norte.
En el hemisferio sur culmina a baja altura durante los meses de febrero, marzo
y abril.
Una
de las características más evidentes al observarla es que tiene forma de
cuadrilátero cuyo asterismo (conjunto de estrellas que vistas desde la tierra
poseen una forma geométrica fácilmente
recordable) es ya muy popular.
Pegaso
fue el caballo más rápido que ha existido y el símbolo de la velocidad como lo
demuestran los cantos inmortales que en su honor entonaron los poetas de todos
los tiempos. Pero, además, fue también el primer medio de comunicación y
transporte que se elevó por los aires. De ahí las numerosas fábulas que le
atribuyeron los griegos y el lugar destacado que ocupa en la mitología.
La
historia de Pegaso, como la mayoría de las leyendas, es una visión en forma de
cuento de ciertas cualidades o imperfeccioneshumanas.
Su
ficción puede haber influido en la
formación de la figura delBuraq de la
tradición islámica. En la obra poética, este animal es pintado a menudo como
una bestia con cara de mujer o también como una criatura híbrida, parte águila
y parte caballo.
Es
uno de los equinos más célebres de la literatura junto con Rocinante (caballo
de Don Quijote de la Mancha), Babieca (el de Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid
Campeador), Bucéfalo (el de Alejandro Magno) y el caballo de Troya.
Ha
sido uno de los caballos mitológicos más llevados al cine al igual que el
unicornio, siendo seres extraordinarios que encajan perfectamente en las
películas de fantasía y ficción.Furia de
Titanes (Clash of theTitans) (2010) puede ser la más representativa.
En la Escuela Dante Alighieri
Conclusión
Si
tenemos en cuenta que las leyendas, por lo general, son una narración oral,
cargada de elementos imaginativos, transmitida de generación en generación, con
frecuencia sucesivamente transformadas; la de Pegaso da lugar a suponer varias
posibilidades:
Tiene
rasgos marcadamente distintivos. Los dioses griegos se parecen exteriormente a
los seres humanos y revelan también sentimientos humanos. Las Gorgonas
simbolizan el pánico, el miedo. Todo aquel que intentara mirarla, quedaría
petrificado y encontraría la muerte.
Contrariamente,
la historia de Perseo nos muestra a alguien que escapa del terror. Está emparentado
a ese breve instante en que el hombre ve la muerte. A diferencia de otros
humanos que sucumben a este momento, éllogra superarla. Lejos de escapar,
enfrenta el peligro.
Aquí
podemos destacar el valor, la prudencia y la inteligencia, las tres virtudes
que posee Perseo en su enfrentamiento con Medusa. El valor, por enfrentarse al
monstruo que todos temen; la prudencia, por no verla de frente evitando
convertirse en piedra; y la inteligencia, por saber mirarla por el reflejo de
su escudo.
Por
otro lado, en cierta forma, Belerofonte representa el lado oscuro de la
ambición, el defecto de la excesiva ambición.Cuando el héroe realiza sus
hazañas obliga a Pegaso a transportarlo al Olimpo, con el propósito de ser
convertido en un dios.Su
caída hace que mutilado
y humillado, pase el resto de sus días vagando en el exilio.
Se
sostiene que Pegaso representa el pensamiento de Zeus, su voluntad y su fuerza,
tan veloces y repentinas que solo pueden proyectarse en alas de lo imposible.
Nosotros
podríamos decir que las virtudes que caracterizan a Pegaso son: el valor, la
prudencia e inteligencia, sumada a valores como la libertad y autonomía.
La
figura del Pegaso es fruto de la imaginación del hombre, su naturaleza
representa creatividad e inspiración, así como carácter, libertad y determinación,
partes esenciales del Humanismo.
Así
mismo la fuerza y la nobleza de este ser, su originalidad, pujanza y belleza
representan las cualidades que todos quisiéramos tener.
El
Pegaso, es un ser que posee la vitalidad y nobleza de un corcel, pero con la
ligereza y elegancia que le da poseer alas.
Carlos de fondo los cuadros de la exposición, María Esther
Carlos
F. Pérez de Villarreal Nacido
en la ciudad de Mar del Plata (1949), es desde el año 2006, Jefe de Redacción
de la “Revista Nueva Etapa”. Ingresó a la misma como Columnista en 1996,
desarrollando una tarea periodística de gran extensión. Integró las Antologías
del Grupo Diversidad Literaria (España) con tres microrrelatos. Laboró en la
Redacción y Diagramación de la Revista ¨”El Paño” de la AECN (2010 a 2012).Es
socio de la Sociedad Argentina de escritores SADE, seccional Atlántica. Desde
2013 comenzó a escribir diferentes relatos, cuentos y microrrelatos
ficcionales, abarcando considerable elementos de la narrativa. Su prosa es
fuerte e impresiona por su realismo, con una estructura de
planteamiento,desarrollo y desenlace muy bien elaborad
No hay comentarios:
Publicar un comentario